Mantener las distancias para gestionar tus emociones

Mantener las distancias a nivel emocional con conciencia es una opción a la que podemos acudir para desidentificarnos del drama de los conflictos y convertirnos en un observador sabio que no juzga.

Es muy importante saber que el objetivo del distanciamiento emocional consciente no es alejarse de las personas, por no saber gestionar nuestras emociones o evitar el conflicto en sí mismo, sino ayudarnos a mejorar nuestras relaciones.

Bienestar emocional y distanciamiento social

La palabra distancia deriva del verbo latín “distare” que significa “estar lejos” o “distar”. Puede referirse a una distancia física, temporal o incluso emocional.

A nivel físico hablamos del intervalo de lugar entre dos elementos. Desde el punto de vista temporal indicamos el espacio de tiempo entre dos acontecimientos. Y, desde la perspectiva emocional, hablamos de distancias afectivas.

En psicología existen diversos estudios que demuestran que cuando estamos implicados emocionalmente, si no sabemos gestionar nuestras emociones, se dificulta ver el panorama completo de una situación. Por eso, una herramienta que podemos usar es mantener las distancias.

En cambio, cuando nuestra misma experiencia le sucede a otro, que está “lejos” vemos con mayor claridad las consecuencias generales.

«Estamos creando una experiencia única. Comienza con la forma en que la ves desde la distancia.»

Helmut Jahn

 

Distancia emocional

La distancia emocional es una estrategia que, utilizada ocasionalmente, nos permite conectar con nosotros mismos y con nuestra sabiduría interior. Cuando tenemos la mente en paz, es mucho más fácil que veamos con claridad cuáles son nuestros deseos de corazón y atenderlos.

Redescubrir que tanto la felicidad como la paz son estados que habitan en nosotros, nos ayuda a establecer relaciones más saludables y beneficiosas. Después de todo, ¿cómo podríamos estar en paz con los demás si no lo estamos con nosotros mismos?

El objetivo de poner distancia emocional en cualquier ámbito de nuestra vida no tiene como fin alejarse de los demás, ni tampoco huir de las situaciones por no enfrentarlas. Si fuera el caso, lo único que estaremos haciendo es postergar un aprendizaje y no atender el verdadero origen de nuestro malestar.

Por lo mismo, es importante reconocer para qué tomamos distancia.  Comprender el motivo nos permitirá decidir con mayor claridad, puesto que el movimiento más importante es el interno.

Estudios que ponen en valor la distancia emocional

Lawrence E. Williams, profesor de la Universidad de Colorado Boulder, y John A. Bargh, profesor de la Universidad de Yale, son psicólogos que investigan las influencias inconscientes o implícitas sobre el juicio social, la motivación y el comportamiento.

Proponen que “las representaciones perceptivas y motoras de la distancia física influyen en los pensamientos de las personas«. Nos recuerdan que todos observamos el espacio en busca de pistas para saber cómo sentirnos, lo que es una forma inconsciente de valorar la situación en la que nos encontramos.

Por ejemplo, si entramos en una habitación desordenada (sin distancia física entre los objetos) no tenemos las mismas sensaciones que si lo hacemos en una ordenada.

«Los celulares ayudan a estar conectados a los que están a distancia. Los celulares permiten a los que se conectan… mantenerse a distancia.»

Zygmunt Bauman

De la misma manera, vivimos inmersos en una serie de metáforas que nos condicionan y que apenas percibimos. Otro ejemplo son los preconceptos internos que tenemos:

Pensamos que arriba es mejor que abajo y valoramos más lleno que vacío; también preferimos más hacia delante que hacia atrás y así sucesivamente.

Ejemplos para comprender la utilidad de la distancia emocional

Cuando las emociones nos abordan, distanciarnos de lo que consideramos el motivo de nuestro estrés puede reducir la intensidad de lo que experimentamos. Y, para tener una nueva percepción de los hechos, algunas veces es necesario tomar distancia y calmar la mente. Así, al acercarnos de nuevo podremos actuar en coherencia con nuestra nueva visión.

A veces la distancia emocional puede ir acompañada de la distancia física, una espacio real entre dos objetos o personas. Esta puede influir en cómo nos sentimos y en cómo pensamos sobre las cosas.

Por ejemplo, si estás hablando con alguien que está muy cerca de ti, es posible que te sientas más incómodo/a porque invade tu espacio personal y puedes sentirte más seguro/a si estás hablando con alguien que está un poco más lejos de ti.

Del mismo modo, si algo te parece muy lejano, ya sea en el tiempo o en el espacio, puede que te sientas menos implicado emocionalmente, menos preocupado/a o interesado/a por ello que si lo tuvieras más cerca.

«A veces es necesario ir muy lejos, fuera del camino, con el fin de volver a la distancia correcta.»

Edward Albee

La distancia física puede influir en cómo nos sentimos y pensamos sobre las cosas. Comprender esto, nos ayuda a entender mejor cómo funciona la distancia psicológica y usarla como una herramienta para aumentar nuestro bienestar y el de nuestro entorno.

La Bioneuroemoción y el distanciamiento emocional consciente

El método de Bioneuroemoción nos ayuda comprender que los estados emocionales por los que atravesamos nos pertenecen única y exclusivamente a nosotros. Esto significa que la responsabilidad de atender nuestro bienestar está en nuestras manos, independientemente de las situaciones de estrés que estemos atravesando.

Comprender esto es de suma importancia para llevar las riendas de nuestra vida y tomar decisiones con conciencia que contribuyan a nuestro estado de plenitud.

Por lo mismo, para conocernos en profundidad a veces es necesario tomar una distancia emocional que nos permita desindetificarnos de las experiencias que vive el personaje que hemos construido de nosotros mismos, para convertirnos en un observador sabio y consciente.

Si quieres seguir profundizando sobre este tema, puedes acceder a este material en nuestro canal de Spotify y de Youtube:

Cuando buscas mantener las distancias ¿lo haces para huir o para conectar contigo mismo/a? En este video David Corbera da un ejemplo de cómo podemos gestionar nuestros estados emocionales e identificar nuestros comportamientos ante el estrés.

En este video se reflexiona que, ante las dificultades que atravesamos, lo importante es la persona en quien nos transformamos y los dones que desarrollamos en el proceso.

Si quieres conocer más acerca del método de la Bioneuroemoción y cómo aplicarlo, tanto personal como profesionalmente, para aumentar el bienestar emocional, síguenos en nuestras redes sociales: YouTube, Instagram, Facebook, Twitter y LinkedIn.

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